Si supiéramos que la vida se nos escurre entre nuestras manos. Si advirtiéramos que indefectiblemente hay una llegada y un fin. ¿Cuántas cosas dejaríamos de hacer ya mismo y cuántas otras comenzaríamos a crear desde ahora? Se puede ver como una posición pesimista y agorera o como la advertencia necesaria para reaccionar.
Solo el que tuvo sed conoce el valor del agua.
Solo el que sufrió de desamor sabe valorar una caricia.
¿Debemos sentirnos morir para valorar la vida, debemos... sentir su pérdida para reconocer al otro?
No perdamos más tiempo en pequeñeces, en peleas sin sentido, en discusiones estériles. Comencemos a tratarnos desde un lugar diferente, desde el amor que da sin esperar recibir. Porque la vida es un regalo, un milagro que no tiene sentido pero que nos ubica aquí por alguna razón y les aseguro, no es para maltratarnos entre nosotros.
Solo el que tuvo sed conoce el valor del agua.
Solo el que sufrió de desamor sabe valorar una caricia.
¿Debemos sentirnos morir para valorar la vida, debemos... sentir su pérdida para reconocer al otro?
No perdamos más tiempo en pequeñeces, en peleas sin sentido, en discusiones estériles. Comencemos a tratarnos desde un lugar diferente, desde el amor que da sin esperar recibir. Porque la vida es un regalo, un milagro que no tiene sentido pero que nos ubica aquí por alguna razón y les aseguro, no es para maltratarnos entre nosotros.
Mucha vida para todos!!
Carlos.
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