Y a diario observo cómo nos hablamos y sobre qué hablamos.
Tal vez sea una excepción, pero escucho una y otra vez un mensaje sobre cómo embellecer EL CUERPO, cómo bajar de peso, cómo estar mas bronceada (en pleno invierno), cómo sostener una dieta,... escucho auto castigos por un poco de harina, o la promesa de abstenerse extremadamente de un chocolate, o un poco de azúcar...
No es lo único de lo que se habla, y muchas veces, da gusto ver como nos apoyamos unas a otras, sin importar mas.
Pero, hay mucho por eliminar para iluminar, y reflexiono sobre algo que para mi forma de ver la Vida, se lleva mas energía y parla de la que creo que merece.
En pocas palabras, nuestro enemigo no esta ahí afuera. Somos nosotras mismas, y nuestro diálogo interno.
Somos nosotras mismas, como mujeres, quejándonos de que nos traten como objeto, y tratándonos como objetos de decoración (de alguien mas...)
Somos nosotras mismas, valorándonos unas a otras por la apariencia,...reforzando y replicando una información errada, y arraigada en nuestro inconsciente femenino y humano.
Estoy totalmente de acuerdo en cuidar el cuerpo, y apreciarnos, porque el cuerpo es el vehículo que inventamos para experimentar este sueño, llamado Vida.
Lo que me preocupa, y hoy me observaba a mi misma, porque la vida es un espejo...es la sobrevaloracion o la valuación de cualquier mujer basándonos en su belleza externa, y con parámetros de modelos.
MODELO...me pregunto qué modelo de mujer nos inspira y nos guía, o estamos persiguiendo?
Esto me vino a la mente pensando en cómo las mujeres- y seguramente también le ocurre a los hombres a su manera- nos convertimos en nuestras propias enemigas cuando el mensaje que enviamos a otras mujeres es que lo que más importa es nuestro cuerpo, cómo nos vemos, cuán bellas estemos para los otros...y que nuestro valor se juzga por eso...
Todos somos responsables sobre nosotros mismos, lo cual ya es bastante...si logramos trascender eso, hallaremos la posibilidad y responsabilidad de ser el espejo del verdadero valor del alma humana, para los otros...
Estemos atentos al mensaje que damos con nuestro ser, sentir, pensar y actuar a nosotros mismos, y a nuestro entorno (que gracias a las redes sociales se amplia cada vez a horizontes mas lejanos...y también implica mayor responsabilidad)
Todos estamos hablándonos unos a otros, de mil maneras...
No quisiera que ninguna de nosotras sintiera ni por un segundo que es menos bella o menos valiosa por elegir ser ella misma, mas allá de lo que el mundo espere o parezca pedirnos por ser mujer...
No quisiera que ninguna de nosotras posterguemos sentirnos valiosas y luminosas para cuando seamos lo que creemos que tenemos que ser para merecerlo.
Bien lo dijo Mía Astral: Tienes un valor inherente a tu existencia. Nada de lo que hagas o dejes de hacer cambia eso.
Ojala pongamos el mismo empeño en aceptarnos antes que en reformarnos...
Llegara el día en que aprendamos a ver en el otro, la perfección de Ser como Es.
La belleza de que no hay standard a seguir ni parámetro mayor que el Amor y aprecio por uno mismo, floreciendo y brotando por todo nuestro ser, en nuestra sonrisa, nuestra mirada, y lo mas importante: en el latir de nuestro Corazón... corriendo por las venas, la alegría de estar vivos.
Ojala pueda ser una manifestación danzante por el mundo de estas palabras que siento y que comparto.
Ojala que la presencia de cada uno de nosotros en la vida del otro
(y de los otros en la nuestra)
sea siempre para inspirar con nuestras diferencias
y nunca para hacer sentir al otro que vale menos, o que valemos mas.
Y viceversa.
Como nos valoramos, valoramos todo en la Vida
y a la Vida misma.
Buena Vida (Ya SOMOS)
Gaby
No hay comentarios:
Publicar un comentario